Los gatos son muy territoriales y, a veces, pueden ser muy difíciles de desalojar. Sin embargo, hay algunas cosas que puedes hacer para ayudar a que se vayan. Lo primero que debes hacer es asegurarte de que no haya comida o agua disponible para ellos. Si hay comida, ellos se quedarán. También debes asegurarte de que no haya lugares para que se escondan, como por ejemplo, debajo de los muebles. Los gatos se sienten seguros cuando tienen un lugar donde esconderse, así que si no pueden esconderse, se irán. Otra cosa que puedes hacer es usar repelentes de gatos. Hay muchos productos en el mercado que se supone que ahuyentan a los gatos. Algunos de estos funcionan mejor que otros, así que tendrás que experimentar un poco para encontrar el que mejor funcione para ti. También puedes tratar de atraer a otros animales, como perros o pájaros, para que los gatos no se sientan tan seguros en tu territorio. Si haces todas estas cosas, es probable que los gatos se vayan.
Los gatos no son criaturas domésticas fáciles de controlar. Aunque sean alimentados y tengan un lugar seguro para vivir, a menudo se encuentran en lugares donde no son bienvenidos. Por supuesto, la mejor manera de evitar que los gatos entren en tu propiedad es mantenerlos alejados desde el principio. Pero si ya tienes un problema de gatos, entonces necesitarás tomar medidas para hacer que los gatos se vayan rápido. Afortunadamente, hay una serie de trucos y técnicas que puedes utilizar para ayudarte a lograrlo.
Una de las maneras más simples de hacer que los gatos se vayan es mediante el uso de repelentes. Estos son productos químicos que se rocían en el área donde se encuentran los gatos. Los repelentes pueden ser comprados en tiendas de mascotas o en línea. Algunos de los más populares incluyen el aceite de naranja amarga, el vinagre de manzana y el aceite de menta. También puedes hacer tu propio repelente usando una mezcla de estos ingredientes. Solo asegúrate de rociar el repelente en lugares donde los gatos suelen estar, como alrededor de la casa, en el porche o en el jardín.
Otra forma de hacer que los gatos se vayan es mediante el uso de trampas. Las trampas para gatos son dispositivos que capturan a los gatos cuando intentan entrar en tu propiedad. Puedes comprar trampas para gatos en tiendas de mascotas o en línea. También puedes hacer tu propia trampa usando una lata de refresco o una caja de cartón. Solo asegúrate de colocar la trampa en lugares donde los gatos suelen estar y verificarla regularmente para asegurarte de que no haya gatos atrapados.
Finalmente, otra forma de hacer que los gatos se vayan es mediante el uso de productos sonoros o luminosos. Los gatos son muy sensibles a los sonidos y a la luz, por lo que puedes usar estos elementos para mantenerlos alejados. Puedes comprar dispositivos sonoros o luminosos en tiendas de mascotas o en línea. También puedes hacer tu propio dispositivo usando una bocina o un reflector. Solo asegúrate de colocar el dispositivo en lugares donde los gatos suelen estar y de encenderlo cuando veas que los gatos están cerca.
Métodos caseros para ahuyentar a los gatos suelen ser eficaces solo de forma temporal, pero son una opción para aquellos que no desean utilizar productos químicos. La pimienta es una especia que a muchos gatos les resulta desagradable. Puedes comprar polvo de pimienta en la mayoría de tiendas de comestibles.
La pimienta es una especia que a muchos gatos les resulta desagradable. Puedes comprar polvo de pimienta en la mayoría de tiendas de comestibles. Mezcla una cucharada de polvo de pimienta con un cuarto de taza de agua. Vierte la mezcla en una botella de rociador y rocía en las áreas donde no quieres que vayan los gatos. Repite la aplicación después de que llueva o riegues las plantas.
Consejos
La pimienta es una especia que a muchos gatos les resulta desagradable. Puedes comprar polvo de pimienta en la mayoría de tiendas de comestibles.
Los gatos son algunos de los animales más misteriosos que existen. No son como los perros, que están siempre dispuestos a hacerte saber lo que sienten. Los gatos son enigmáticos, y esto es parte de su encanto. Sin embargo, a veces esto puede ser frustrante, especialmente cuando estás tratando de descifrar lo que realmente les molesta.
Aunque no son tan expresivos como los perros, los gatos pueden ser muy buenos para comunicar lo que sienten a través de sus movimientos y comportamientos. Si estás atento a lo que hacen, puedes aprender mucho sobre lo que les gusta y lo que no.
Aquí hay algunas de las cosas que los gatos odian:
El agua: A muchos gatos no les gusta mojarse, y el agua es una de las cosas que más les molesta. Si tu gato no quiere acercarse a la bañera o al fregadero, es probable que sea porque no le gusta el agua.
Los cambios: A los gatos les gusta el orden y la rutina, y no les gusta cuando algo cambia. Si has cambiado de casa o de trabajo, es posible que tu gato esté un poco molesto. También pueden molestarse si cambias su comida o la ubicación de su litera.
La soledad: Aunque los gatos son animales independientes, a algunos no les gusta estar solos. Si tu gato siempre está siguiéndote por la casa o tratando de ser el centro de atención, es probable que sea porque no le gusta estar solo.
La incomodidad: A los gatos les gusta estar cómodos, y no les gusta que los toquen o los acaricien en lugares en los que no quieren ser tocados. Si tu gato siempre está tratando de alejarte cuando lo tocas, es posible que no le guste que le hagas cariños.
Los ruidos fuertes: A muchos gatos no les gustan los ruidos fuertes, especialmente si son repentinos. Si tu gato se asusta con facilidad o se esconde cuando hay un fuerte ruido, es posible que no le gusten los sonidos fuertes.
Los gatos pueden ser muy molestos, especialmente si usted no los quiere en su jardín. Afortunadamente, existen varias formas de ahuyentarlos de forma natural y efectiva. A continuación le presentamos las principales:
La primera opción consiste en colocar una cacerola con agua en el lugar donde los gatos hacen sus necesidades. El agua actuará como una barrera y los hará irse a otro sitio. No obstante, esto solo funcionará si el gato no tiene acceso a otras fuentes de agua en el jardín.
Otra forma de alejarlos es utilizar repellentes naturales como el aceite de menta o el aceite de naranja. Solo tienes que mezclar unas gotas de estos aceites con agua y rociar la zona donde quieras que los gatos no vayan. No obstante, es importante que tengas en cuenta que estos aceites son tóxicos para los gatos, por lo que no debes usarlos si tienes uno en casa.
Por último, otra forma de evitar que los gatos entren en tu jardín es plantar ciertas hierbas como el tomillo, la menta o el eucalipto. Estas hierbas tienen un olor fuerte que los gatos no soportan y los alejarán del lugar. Si no quieres plantar hierbas, también puedes comprar unas bolsitas de té menta y colgarlas en los lugares donde quieras que los gatos no vayan.