Los gatos son muy sensibles al calor, y pueden sufrir graves consecuencias si no están protegidos del calor excesivo. Aunque algunos gatos pueden tolerar el calor mejor que otros, todos los gatos necesitan un lugar fresco y ventilado para descansar y refrescarse. Los gatos también necesitan tener acceso a agua fresca y limpia en todo momento.
Aunque algunos gatos puedan resistir el calor mejor que otros, todos los gatos necesitan un lugar fresco y ventilado para descansar y refrescarse. Los gatos también necesitan tener acceso a agua fresca y limpia en todo momento.
Si tu gato empieza a mostrar signos de estrés o enfermedad debido al calor, es importante actuar rápidamente para ayudarle a recuperarse. Algunos signos de que tu gato está sufriendo el calor son:
Si tu gato muestra cualquiera de estos signos, lo llevarás al veterinario de inmediato. Mientras esperas a que llegue el veterinario, puedes ayudar a tu gato a enfriarse poniéndolo en un lugar fresco y ventilado, y asegurándote de que tenga acceso a agua fresca y limpia.