La gata está embarazada y el gato está muy ocupado cuidándola. Le trae comida, le limpia el pelo y le hace cosquillas para que se sienta mejor. También duerme mucho con ella para que se sienta segura y protegida. El gato realmente se esfuerza por ser un buen esposo y padre.
Los gatos son animales que pueden ser muy protectoras de sus cachorros, incluso si no son de su propia especie. Si tu gato se comporta de forma protectora hacia ti, es probable que también se muestre así con una gata embarazada. Es posible que veas que tu gato se acerca a la gata embarazada y comienza a lamerla, a limpiarla y a cuidarla. También es posible que veas que tu gato se aleja de la gata embarazada y no quiera tener nada que ver con ella. Esto es normal y no significa que tu gato no la quiera. Es posible que tu gato simplemente no sepa cómo reaccionar ante una gata embarazada y esté un poco asustado o confundido. Si tu gata se comporta de forma protectora hacia ti, es probable que también se muestre así con una gata embarazada.
Hay algunas cosas que puedes hacer para ayudar a tu gato a que se sienta mejor si está un poco asustado o confundido. Puedes hablarle suavemente y acariciarlo para que sepa que todo está bien. También puedes darle un poco de espacio extra si necesita estar solo. Si tu gato sigue siendo muy protector, es posible que quiera estar cerca de la gata embarazada todo el tiempo. Esto está bien, siempre y cuando no moleste a la gata embarazada. Si tu gata parece estar molesta o si comienza a pelearse con la gata embarazada, es posible que necesites separarlos para evitar que se lastimen.
En general, los gatos son muy buenos cuidando a las gatas embarazadas. Si tu gato se comporta de forma protectora hacia ti, es probable que haga lo mismo con una gata embarazada. Si tu gato está un poco asustado o confundido, puedes hablarle suavemente y acariciarlo para que sepa que todo está bien. Si tu gato sigue siendo muy protector, es posible que quiera estar cerca de la gata embarazada todo el tiempo. Esto está bien, siempre y cuando no moleste a la gata embarazada.
Aunque cada gata es diferente, el embarazo suele durar unos 63 días. Algunas gatas pueden tener un embarazo más corto o más largo, pero la mayoría de las gatas dan a luz a sus cachorros entre las seis y las ocho semanas después de aparearse. Aquí tienes una guía de las etapas del embarazo de una gata, desde los primeros días hasta el parto.
Los primeros días: Es probable que no notes ningún cambio en tu gata durante las primeras dos o tres semanas después de que se aparee. No obstante, es importante que lleves a tu gata al veterinario para que le hagan un análisis de sangre y le confirmen el embarazo.
Una vez que se haya confirmado el embarazo, es probable que tu gata empiece a engordar un poco. También puede que cambie su apetito y que tenga antojos de comer cosas que antes no le gustaban. Es posible que tu gata se ponga un poco más lenta y que duerma más de lo habitual.
Las últimas semanas: A medida que se acerca el final del embarazo, tu gata puede que engorde un poco más. Sus pechos se agrandarán y se llenarán de leche, y sus mamas pueden que se inflamen y se vean más rojas de lo habitual. Es posible que tu gata tenga náuseas y vómitos, y que tenga menos ganas de jugar o de salir de casa.
Cuando faltan unas pocas semanas para que tu gata dé a luz, es probable que empiece a buscar un lugar tranquilo y seguro para tener a sus cachorros. Puede que rasgue la ropa de cama para hacerse un nido, o que empiece a excavar en la tierra del jardín. Si tu gata no tiene acceso a un lugar seguro, es posible que tengas que hacerle un nido en casa.
El parto: El parto suele durar unas 12 horas, pero puede que dure más o menos tiempo. Los primeros cachorros suelen nacer sin problemas, pero es posible que el segundo o el tercero necesiten un poco de ayuda para salir. Si notas que el parto se está prolongando más de lo esperado, o si tu gata parece estar en dificultades, llama a tu veterinario de inmediato.
Después de que nazca el último cachorro, tu gata expelerá la placenta. Es importante que cuentes las placentas para asegurarte de que tu gata no ha retenido ninguna, ya que esto podría ser muy peligroso. Si todo va bien, tu gata se pondrá a cuidar de sus cachorros y empezará a lamerlos para limpiarles y estimular su circulación. ¡Enhorabuena! Ahora eres el orgulloso propietario de una familia de gatitos.
Si tu gata es sexualmente activa, es importante que la mantengas esterilizada o castrada para evitar que quede embarazada. Sin embargo, a veces es difícil controlar todos los factores y puede que tu gata quede embarazada sin que te des cuenta. Si sospechas que tu gata puede estar embarazada, hay algunos signos que puedes buscar para confirmarlo.
1. Cambios en el cuerpo. Uno de los primeros signos de que tu gata está embarazada es un aumento de peso. También puedes notar que sus pechos se han vuelto más grandes y que están más sensibles al tacto. Otra señal es que su estómago está más redondeado y abultado.
2. Cambios en el comportamiento. Otra forma de saber si tu gata está embarazada es observar su comportamiento. Puede que se vuelva más cariñosa y protectora, o que se muestre más agresiva. También puede que cambie su apetito, y que quiera comer más o menos de lo habitual.
3. Cambios en el ciclo menstrual. Si tu gata no está esterilizada, puedes notar que su ciclo menstrual se ha alterado. Puede que deje de tener la menstruación o que tenga un flujo más abundante o escaso de lo normal.
4. Pruebas de embarazo. Si quieres estar segura de que tu gata está embarazada, puedes realizarle una prueba de embarazo en casa. Existen pruebas de embarazo específicas para gatos que se pueden adquirir en tiendas de mascotas. También puedes acudir a tu veterinario para que te haga una prueba de embarazo más precisa.
Si crees que tu gata puede estar embarazada, lo mejor es acudir a tu veterinario para que te asesore sobre el cuidado que necesita. Durante el embarazo, es importante que tu gata tenga una dieta balanceada y que esté protegida de enfermedades. Tu veterinario también podrá hacerte una ecografía para que veas los gatitos dentro del vientre de tu gata.