Los gatos son muy sensibles a las infecciones en el oído. Una infección del oído puede ser muy dolorosa para un gato y puede ser una indicación de un problema más grave. Si sospecha que su gato puede tener una infección del oído, consulte a su veterinario de inmediato. Hay una serie de síntomas que pueden indicar que su gato tiene una infección del oído.
1. Exceso de arañado o limpieza del oído
Uno de los primeros signos de una infección del oído en un gato es que él o ella va a arañar o limpiar el oído con frecuencia. Si usted observa que su gato está haciendo esto, especialmente si el arañado es excesivo, puede ser un signo de que hay una infección.
2. Enrojecimiento e hinchazón del oído
Otro signo común de una infección del oído en un gato es que el oído estará enrojecido e hinchado. Esto es especialmente evidente si el gato tiene una infección en uno de sus oídos. Si usted observa este signo, es importante que lleve a su gato al veterinario lo antes posible.
3. Pérdida del equilibrio
Una de las complicaciones más graves de una infección del oído en un gato es que puede perder el equilibrio. Si usted observa que su gato está teniendo problemas para mantenerse en pie o caminar, es importante que lleve a su gato al veterinario de inmediato. Esto puede ser un signo de que la infección se ha extendido a los nervios del oído y puede ser muy doloroso para el gato.
4. Otitis externa
Otra complicación de una infección del oído en un gato es la otitis externa. Otitis externa es una infección de la piel alrededor del oído. Si usted observa que su gato tiene una erupción en la piel alrededor de uno de sus oídos, es importante que lleve a su gato al veterinario de inmediato.
5. Pérdida de audición
Una de las complicaciones más graves de una infección del oído en un gato es la pérdida de audición. Si usted observa que su gato está teniendo problemas para oír, es importante que lleve a su gato al veterinario de inmediato. La pérdida de audición puede ser un signo de que la infección se ha extendido a los nervios del oído y puede ser muy doloroso para el gato.
Uno de los problemas de salud más comunes en los gatos es la infección del oído. A menudo, las infecciones del oído se deben a un exceso de cerumen o cera en el oído, que puede ser causado por una variedad de factores, como el polvo, el sebo, las bacterias o las alergias. Si no se trata, la infección del oído puede dañar el tímpano y causar pérdida de audición. Afortunadamente, la mayoría de las infecciones del oído de los gatos pueden ser tratadas en casa con medicamentos recetados por el veterinario. Si sospecha que su gato puede tener una infección del oído, lo primero que debe hacer es llevarlo al veterinario para que lo examine y le dé un diagnóstico.
El tratamiento de la infección del oído de los gatos generalmente consiste en limpiar los oídos con un limpiador de oídos especial que se puede comprar en la mayoría de las tiendas de mascotas o en línea. También se puede utilizar un gotero para administrar gotas de oído en el oído del gato. Estas gotas generalmente contienen un antibiótico y/o un antiinflamatorio que ayudarán a curar la infección y aliviar el dolor. Si el gato tiene una infección grave o crónica, el veterinario puede recetar antibióticos orales.
Después de limpiarlos o tratarlos con gotas, asegúrese de secar bien los oídos del gato con una toallita de papel o un paño suave. Si no se secan bien, el líquido puede irritar la piel del oído del gato y empeorar la infección. Asegúrese de seguir las instrucciones del veterinario al pie de la letra y de comunicarse con el veterinario si los síntomas persisten o si el gato parece estar en dolor.
La otitis es una inflamación del oído, que puede ser provocada por varios factores. Algunos de ellos son:
Los síntomas de la otitis en gatos son:
Si detectas cualquiera de estos síntomas en tu gato, acude al veterinario lo antes posible para que pueda diagnosticar y tratar a tu mascota.