Maullar, arañar y acurrucarse. Todos los gatos necesitan hacerlo. ¿Pero qué pasa si no tienes un gato? No te preocupes, puedes comprar uno de peluche. Si eres más creativo, puedes hacer uno tú mismo. A continuación, te mostramos cómo.
En primer lugar, necesitas tela, aguja e hilo. Puedes usar cualquier tela que tengas, pero si quieres que sea suave, te recomendamos que uses peluche. Si no tienes peluche, puedes usar otra tela, pero no será tan suave.
En segundo lugar, corta la tela en la forma de un gato. Puedes usar un patrón si lo deseas, pero si no, puedes hacerlo a ojo. Si no sabes cómo hacer un gato, puedes buscar uno en internet o en un libro.
En tercer lugar, coser la tela. Si no sabes coser, puedes pedirle a alguien que te ayude. Asegúrate de dejar un hueco para rellenar el gato con algodón o pelusa.
Por último, rellena el gato con el algodón o la pelusa y cierra el hueco. Y ¡listo! Tienes un gato de peluche.
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