Los gatos son una especie de mamíferos carnívoros de la familia Felidae. El término 'gato' hace referencia, tanto a los gatos domésticos como a las distintas subespecies de felinos silvestres. Según la classificación científica, los gatos pertenecen al género Felis, que a su vez forma parte de la subfamilia Felinae, dentro de la familia Felidae.
Los gatos domésticos son las mascotas más populares en todo el mundo, y se estima que existen más de 600 millones de ejemplares en todo el mundo. En España, según el último censo de mascotas, en 2016 había 5,3 millones de gatos domésticos, lo que supone una tasa de 12,6 gatos por cada 100 habitantes.
Los gatos domésticos tienen su origen en África, donde todavía existe una especie salvaje de gatos, el gato africano. Los gatos domésticos se descendieron de esta especie hace unos 9.000 años. Se cree que los gatos domésticos fueron domesticados por primera vez en El Cairo, Egipto, donde eran muy venerados. De Egipto, los gatos se extendieron por todo el Mediterráneo y llegaron a Europa hace unos 2.000 años. En la Edad Media, los gatos eran muy populares en Europa, sobre todo en Inglaterra y Francia.
Los gatos tienen un cuerpo flexible y musculoso, que les permite saltar y trepar con facilidad. La mayoría de las especies de gatos tienen pelo, que les protege del frío y les ayuda a camuflarse. Los gatos tienen orejas grandes y ojos muy grandes en relación con el tamaño de su cuerpo, lo que les permite ver y escuchar muy bien. La mayoría de los gatos tienen bigotes en las mejillas, que les ayudan a percibir el viento y a moverse en la oscuridad.
Los gatos tienen un sentido del olfato y un sentido del tacto muy desarrollados. Tienen una lengua áspera, que les ayuda a limpiarse y a lamerse. Los gatos también tienen un sentido del equilibrio muy desarrollado, que les permite caminar y correr con facilidad.
Los gatos son animales solitarios y territoriales. Cada gato tiene su propio territorio, que puede ser defendido contra otros gatos. Los gatos domésticos pasan la mayor parte de su tiempo durmiendo. Los gatos son carnívoros y se alimentan de insectos, avecillas, roedores y reptiles. Los gatos también pueden comer carne y pescado.
Los gatos son muy limpios. Se lavan y se cepillan el pelo regularmente. También se lavan con la lengua áspera para quitarse el polvo y las impurezas. Los gatos tienen un olfato muy sensible, por lo que evitan los lugares sucios y malolientes.
Los gatos son animales muy silenciosos. Solo hacen ruido cuando maullan, ronronean o resoplan. Los gatos también pueden maullar cuando están enfermos o asustados.
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