Los gatos son animales muy inteligentes, y aunque a veces parezcan indiferentes, en realidad les gusta mucho la compañía de los humanos. Sin embargo, a diferencia de los perros, los gatos no están naturalmente programados para vivir en armonía con los niños. Aquí hay algunos consejos para ayudar a que su gato y su niño se lleven bien:
- No esperes que tu gato se porte como un perro. Acepta que tu gato es un gato, y no trates de forzarlo a que se comporte de una manera que no le viene natural. Los gatos no son animales de juego activo, y no les gusta que los persigan o los toquen bruscamente. Si tu niño es muy activo, quizás quieras considerar adoptar un perro en lugar de un gato.
- Enséñale a tu niño a respetar el espacio del gato. Todos los animales necesitan un lugar seguro donde puedan retirarse para descansar y recuperarse del estrés. Enséñale a tu hijo a respetar el territorio del gato, y a no molestarlo cuando esté durmiendo o comiendo. Deja que tu gato se acostumbre a tu niño poco a poco, y no permitas que tu hijo juegue con el gato si éste no quiere.
- No dejes que tu gato se sienta encerrado o amenazado. A los gatos no les gusta que los persigan, y si sienten que están encerrados o amenazados, pueden volverse agresivos. Asegúrate de que tu gato siempre tenga un escape seguro, y de que tu niño no lo acose. Si tu gato se siente amenazado, puede llegar a morder o arañar, así que enséñale a tu niño a ser respetuoso.
- Ofrece a tu gato muchas oportunidades para jugar. Aunque los gatos no sean naturalmente animales de juego activo, les gusta jugar. Ofrece a tu gato muchos juguetes, y asegúrate de que dispone de un lugar tranquilo y seguro donde pueda retirarse cuando haya terminado de jugar.
- Entrena a tu gato para que haga sus necesidades en el lugar adecuado. A los gatos no les gusta hacer sus necesidades en un lugar sucio, así que asegúrate de mantener el arenero limpio. Si tu gato hace sus necesidades fuera del arenero, limpia inmediatamente el área para evitar que vuelva a hacerlo.
- No te olvides de cuidar de ti mismo. Los gatos son animales muy sensibles, y pueden percibir el estrés y la ansiedad de los humanos. Asegúrate de cuidar de tu propio bienestar, para que tu gato pueda sentirse seguro y tranquilo contigo.
Sigue estos consejos, y tu gato y tu niño podrán convivir en armonía. Recuerda que la clave para que funcione es la paciencia, y que se necesita tiempo para que los gatos y los niños se acostumbren el uno al otro.
Gracias a esta de productos vamos a mostrarte lo mejor en gatos vs ninos para el confort de tu animal de compañía. Aquí encontrarás lo mejor para tu gato, teniendo la oportunidad de comparar entre las mejores opciones del mercado.