A menudo, los gatos enfermos desarrollan un olor distinto a los gatos sanos. A veces, el olor es un indicador de una enfermedad grave. Si nota que su gato huele diferente, es importante llevarlo al veterinario para un examen. Algunas enfermedades que pueden hacer que un gato huela mal: • Infección del tracto urinario - Una infección del tracto urinario es una de las enfermedades más comunes que pueden causar que un gato huela mal. Los gatos con esta afección pueden orinar fuera de la caja de arena y tener una orina con olor fuerte. • Gingivitis - La gingivitis es una inflamación de las encías. Los gatos con gingivitis pueden tener encías enrojecidas y hinchadas, y su aliento puede oler mal. • Resfriado o gripe - Un gato con un resfriado o gripe puede tener una nariz mocosa y húmeda, y su aliento puede oler a moho. • Cáncer - El cáncer puede causar una variedad de síntomas, incluyendo un olor desagradable. Los gatos con cáncer pueden tener un tumor que se puede ver o sentir, y pueden también tener un apetito reducido, pérdida de peso y un olor desagradable. Si su gato huele mal, es importante llevarlo al veterinario para un examen. El veterinario puede determinar la causa del olor y tratar la enfermedad subyacente.
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