Los perros son animales muy sociales, por lo que les encanta el contacto con las personas. Sin embargo, cuando se trata de una entrevista, pueden sentirse un poco nerviosos. Es importante hacerles sentir seguros y a gusto para que puedan relajarse y expresarse libremente. Aquí hay algunos consejos para hacer que la entrevista sea una experiencia positiva para el perro.
1. Hágale saber al perro que está a salvo
Los perros son muy sensibles a la energía de las personas, por lo que es importante que trates de mantener una energía tranquila y relajada. Si el perro siente que estás nervioso o ansioso, esto puede hacer que se ponga nervioso también. Trata de mantener una postura relajada y hablar en un tono de voz tranquilo y monótono. También puedes ofrecerle una golosina para que sepa que no hay nada de qué preocuparse.
2. Dale tiempo para que se acostumbre
No te apresures y déjale al perro tiempo para acostumbrarse a tu presencia. Si te acercas demasiado rápido o tratas de tocarlo sin previo aviso, puede asustarlo o ponerlo nervioso. Dale unos minutos para que se acostumbre a tu presencia y luego puedes hacer contacto visual y ofrecerle una golosina. Una vez que esté cómodo contigo, puedes empezar a hacerle preguntas.
3. Haz preguntas abiertas y específicas
Evita hacer preguntas generales como "¿cómo estás?" o "¿qué tal tu día?". En su lugar, haga preguntas específicas que requieran una respuesta concreta. Por ejemplo, "¿te gusta jugar con pelotas?" o "¿te gustan los paseos?". Las preguntas abiertas también son buenas, ya que le permiten al perro expresarse de manera más libre. Por ejemplo, "¿qué te gusta hacer cuando salís a pasear?" o "¿te gusta jugar con otros perros?".
4. Escucha atentamente
Dale al perro tiempo para que responda a tus preguntas. No te apresures y deja que el perro se exprese a su ritmo. Escucha atentamente a lo que dice y trata de no interrumpirlo. Si no entiendes lo que dice, puedes hacer preguntas para aclarar sus respuestas. Por ejemplo, "¿quieres decir que te gusta jugar fetch?" o "¿te gusta más correr o caminar?".
5. Termina la entrevista de manera positiva
Cuando hayas terminado de hacer preguntas, asegúrate de terminar la entrevista de manera positiva. Dile al perro que ha sido un buen chico y ofrécele una golosina. Luego, dale unas palmaditas en la cabeza y permítele irse. Si te has sentido cómodo con el perro, puedes considerar hacer una segunda entrevista en otro momento.
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