Embarazo y animales domésticos son una mezcla bastante común. Según la Asociación Americana de Salud Pública, el 62 por ciento de los hogares estadounidenses tienen un animal de compañía, y el 36 por ciento de esos hogares tienen un gato.
Si bien los gatos pueden ser muy gratos durante el embarazo, también pueden presentar algunos riesgos. Afortunadamente, la mayoría de estos riesgos se pueden evitar con un poco de cuidado y conocimiento.
toxoplasmosis
La toxoplasmosis es una enfermedad parasitaria que se puede contraer al ingerir carne cruda o poco cocida, leche cruda o productos derivados de la leche, o al entrar en contacto con tierra o agua contaminadas con heces de gato.
La toxoplasmosis puede ser muy peligrosa para el bebé en desarrollo, y puede causar un aborto, un parto prematuro o un bebé con retraso mental.
Afortunadamente, la toxoplasmosis es relativamente fácil de evitar. Los médicos recomiendan que las mujeres embarazadas eviten el contacto con tierra o agua contaminadas, y se lavan las manos con frecuencia. También se recomienda evitar el contacto directo con gatos, y no limpiar el arenero del gato.
Virus del herpes
El virus del herpes simple 1 (HSV-1) es un virus muy común que puede causar una infección ocular llamada queratitis herpética. El virus del herpes también puede ser transmitido de la madre al bebé durante el embarazo, lo que puede causar una infección grave del sistema nervioso central del bebé.
Afortunadamente, el virus del herpes es relativamente fácil de evitar. Los médicos recomiendan que las mujeres embarazadas eviten el contacto directo con gatos, y se lavan las manos con frecuencia. También se recomienda evitar el contacto con gatos que tengan herpes o que estén enfermos.
Sarna
La sarna es una enfermedad de la piel causada por un parásito llamado Sarcoptes scabiei. Los gatos no son la única fuente de sarna, pero pueden ser portadores del parásito.
La sarna puede ser muy molesta para la madre, y también puede ser transmitida al bebé durante el embarazo. Afortunadamente, la sarna es relativamente fácil de tratar con un medicamento llamado Permethrin.
Salmonella
La salmonela es una bacteria que se puede encontrar en la carne cruda o poco cocida, la leche cruda o los productos derivados de la leche, y también en las heces de los animales.
La salmonela puede ser muy peligrosa para la madre y el bebé, y puede causar un aborto, un parto prematuro o un bebé con retraso mental.
Afortunadamente, la salmonela es relativamente fácil de evitar. Los médicos recomiendan que las mujeres embarazadas eviten el contacto con carne cruda o poco cocida, leche cruda o productos derivados de la leche, y se lavan las manos con frecuencia. También se recomienda evitar el contacto con gatos que estén enfermos.
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