Si te fijas, las pupilas de los gatos en estado de reposo suelen estar contraídas, de manera que la apertura de los ojos es mínima.
Sin embargo, existen ocasiones en las que los felinos pueden llegar a tener los ojos cerrados durante largos períodos de tiempo. Si esto sucede con tu mascota, tal vez te estés preguntando si está enferma.
Por lo general, no debes preocuparte si tu gato tiene los ojos cerrados en momentos puntuales. Es decir, si de repente levanta la cabeza y los tiene completamente cerrados, pero sólo durante unos segundos.
Por el contrario, si tu felino está durante largos períodos de tiempo con los ojos cerrados, es posible que esté enfermo. En este caso, deberás llevarlo al veterinario.
Algunas de las enfermedades ocular en gatos que pueden ser la causa de que tengan los ojos cerrados con frecuencia son las siguientes:
Por lo tanto, si tu gato está durante largos períodos de tiempo con los ojos cerrados, es mejor que acudas al veterinario. De esta forma, podrás descartar que se trate de una enfermedad y, en su defecto, encontrar un tratamiento adecuado para tu felino.
Cuando un gato no puede abrir los ojos, puede ser un signo de que está enfermo. Si tu gato está teniendo este problema, es importante llevarlo al veterinario para que le hagan un examen. A veces, el problema puede ser causado por una simple alergia o por un cambio de temperatura, pero también puede ser un signo de una enfermedad más grave. El veterinario examinará a tu gato y le hará un diagnóstico. Si el problema es causado por una enfermedad, el veterinario tratará de tratarla. En algunos casos, el problema puede ser crónico y no se puede curar, pero el veterinario puede ayudar a tu gato a manejar los síntomas y a mejorar su calidad de vida.
Si tu gato no puede abrir los ojos, es importante que lo lleves al veterinario de inmediato. El diagnóstico y el tratamiento tempranos pueden ayudar a tu gato a mejorar y a evitar que el problema empeore.
Los gatos son muy independientes, y a menudo preferirán estar solos. Sin embargo, si su gato está durmiendo con un ojo abierto, es posible que sepa que están siendo observados. Es común que los gatos duerman con un ojo abierto, y no es necesariamente una señal de que estén enfermos. De hecho, muchos gatos duermen con un ojo abierto para estar alerta ante posibles peligros. Si ve que su gato está durmiendo con un ojo abierto, simplemente puede ser una cuestión de preferencia. No obstante, si su gato está durmiendo con ambos ojos abiertos, es posible que haya algo más que una simple preferencia.
Si su gato está durmiendo con ambos ojos abiertos, es posible que haya un problema de salud subyacente. Algunas enfermedades ocular, como el glaucoma, pueden causar que los ojos se dilaten y no se cierren completamente. Si nota que su gato está durmiendo con los ojos abiertos y tiene otros síntomas, como dificultad para ver o pérdida de apetito, es importante llevarlo al veterinario para un examen. Otros problemas de salud, como la diabetes, también pueden causar que los ojos se abran de par en par.
Si su gato está durmiendo con un ojo abierto y no tiene otros síntomas, es probable que simplemente prefiera dormir de esa manera. Aunque no está del todo claro por qué los gatos duermen de esta manera, se cree que es una forma de mantenerse alerta ante posibles peligros. Los gatos son criaturas muy cautelosas, y dormir con un ojo abierto les permite estar alerta ante cualquier amenaza. Si su gato está durmiendo con un ojo abierto, es probable que no haya nada de qué preocuparse.
Los gatos son unos animales muy limpios y cuidadosos, y rara vez necesitan que les lavemos. Sin embargo, en ocasiones sus ojos se pueden llenar de suciedad o de una sustancia pegajosa llamada moco, que les impide ver con claridad. Afortunadamente, limpiar los ojos de un gato es una tarea sencilla. Solo necesitas unas cuantas cosas para hacerlo.
Lo primero que necesitas es unas toallitas húmedas. Puedes usar toallitas de bebé, toallitas desmaquillantes o incluso un paño de microfibra humedecido. Evita usar cualquier cosa que pueda irritar los ojos del gato, como un paño de papel, una toalla de papel o una toalla de cocina. También es importante que no uses ningún tipo de jabón, ya que puede ser muy irritante para los ojos de tu gato.
Una vez que tengas las toallitas húmedas, sostén al gato con suavidad mientras le limpias los ojos. Si es necesario, puedes pedirle a otra persona que te ayude a sujetarlo. Comienza limpiando suavemente la parte exterior de cada ojo, utilizando movimientos circulares. Si ves que hay algo pegado a los ojos, no lo tires. En su lugar, sostén la toallita húmeda contra el ojo para que se ablande y luego intenta limpiarlo nuevamente. Si no puedes quitarlo con facilidad, llévate al gato al veterinario.
Después de limpiar la parte exterior de los ojos, sigue limpiando la parte interior de la misma manera. Asegúrate de no irritar los ojos del gato y de no dejar ningún rastro de jabón. Si los ojos del gato están muy sucios, puedes repetir el proceso una vez más. Cuando hayas terminado, aplica un poco de aceite mineral en los ojos del gato para que no se sequen. Este paso es opcional, pero recomendado. Luego, deja que el gato se lama los ojos para que se limpien por sí mismo.
¡Y eso es todo! Limpiar los ojos de un gato es una tarea sencilla que se puede hacer en casa. Si tienes alguna pregunta o inquietud, puedes consultar a tu veterinario.