Los gatos son animales muy limpios y es normal que les guste beber agua. Lo que no es normal es que beban grandes cantidades de agua y, al mismo tiempo, no coman. Si esto sucede, es posible que tu gato tenga un problema de salud y debas llevarlo al veterinario.
Los gatos necesitan agua para vivir. Es necesario para todas sus funciones corporales, incluyendo la digestión, el metabolismo y la eliminación de residuos. El agua también ayuda a mantener la temperatura corporal y la humedad de la piel.
Un gato puede beber entre 50 y 80 mililitros de agua por kilo de peso corporal al día. Esto significa que un gato de 4 kilos necesitaría beber aproximadamente 200 mililitros de agua al día. Sin embargo, esta cantidad puede variar según la dieta del gato, el clima y el nivel de actividad.
Si tu gato bebe más de lo normal y al mismo tiempo no come, puede ser un signo de que algo no va bien. Posibles causas de esto pueden ser:
Si tu gato bebe mucha agua y no come, lo mejor es llevarlo al veterinario. El veterinario determinará la causa de este problema y le recetará el tratamiento adecuado.
Si tu gato no está comiendo y solo toma agua, es importante que lo lleves al veterinario para que pueda diagnosticarlo y tratarlo. Es posible que haya un problema médico subyacente, como una enfermedad o una infección. Si no se trata, el gato puede enfermarse gravemente o incluso morir.
Algunas enfermedades que pueden causar que un gato no coma son la anemia, el cáncer, las infecciones, las enfermedades del corazón, el hipotiroidismo y el estrés. Si el gato está estresado, es posible que no tenga hambre. Algunos gatos también pueden dejar de comer si no les gusta su comida o si están tratando de manipular a sus dueños para obtener un tipo de comida diferente.
Si el gato no está comiendo y solo toma agua, puedes intentar cambiar su comida para ver si le gusta un tipo diferente. También puedes probar diferentes técnicas de entrenamiento, como la estimulación del olfato, para ver si el gato está interesado en comer. Si nada funciona, es importante llevar al gato al veterinario para que pueda diagnosticar y tratar el problema.
¿Has notado que tu gato come mucho y toma mucha agua últimamente? Si es así, es posible que te estés preguntando si esto es normal o si deberías llevarlo al veterinario.
En general, un gato come entre 20 y 30 gramos de comida por kilogramo de peso corporal al día. Por ejemplo, un gato de 4 kg necesitaría entre 80 y 120 gramos de comida al día. Sin embargo, si tu gato está comiendo más de lo normal, puede ser un signo de que algo no está bien.
Al igual que con la comida, la cantidad de agua que tu gato toma también puede ser un indicador de su estado de salud. Un gato sano bebe entre 50 y 80 mililitros de agua por kilogramo de peso corporal al día. Por ejemplo, un gato de 4 kg necesitaría entre 200 y 320 mililitros de agua al día.
Si tu gato está comiendo y bebiendo más de lo normal, es posible que tenga una condición médica llamada hipertiroidismo. El hipertiroidismo es una afección en la que la glándula tiroides produce demasiada hormona tiroidea. Esta hormona regula el metabolismo, por lo que cuando hay un exceso de ella, el metabolismo se acelera.
Los síntomas del hipertiroidismo en gatos incluyen aumento de apetito, aumento de la ingesta de agua, pérdida de peso, nerviosismo, hiperactividad, ansiedad, aumento de la eliminación de orina y diarrea.
Si crees que tu gato puede tener hipertiroidismo, lo más importante es que lo lleves al veterinario para que le hagan un examen físico y le realicen pruebas de laboratorio para confirmar el diagnóstico. El tratamiento del hipertiroidismo en gatos generalmente consiste en tomar un medicamento llamado carbamazepina durante el resto de su vida.
Hay muchas razones por las que un gato puede dejar de comer, y algunas de ellas son muy serias. Si tu gato deja de comer, lo primero que debes hacer es llevarlo al veterinario para que pueda descartar cualquier problema de salud. Si el veterinario determina que tu gato está sano, entonces puedes probar algunas de las siguientes ideas para ayudarlo a comer.
Cambia su comida
A algunos gatos les gusta comer la misma comida todos los días, pero a otros les gusta cambiar de vez en cuando. Si tu gato ha estado comiendo la misma comida durante un tiempo y de repente deja de comer, puede que simplemente necesite un cambio. Prueba darle una comida diferente para ver si eso lo motiva a comer.
Prueba diferentes sabores y texturas
Al igual que con los humanos, a los gatos les gustan algunos sabores y texturas de comida más que otros. Si tu gato no está comiendo, prueba darle una comida con un sabor o textura diferente. Algunos gatos prefieren comidas más suaves, mientras que otros prefieren comidas con un poco más de sabor. También puedes probar diferentes temperaturas de comida, ya que a algunos gatos les gusta comer comidas calientes o frías.
Mantén la comida fresca y limpia
Asegúrate de que la comida que le das a tu gato esté fresca y limpia. Si la comida está rancia o sucia, tu gato probablemente no querrá comerla. También asegúrate de que la comida no esté expuesta al aire por mucho tiempo, ya que se puede echar a perder. Si la comida está en un recipiente cerrado, asegúrese de abrirlo justo antes de dárselo a su gato para que no pierda su frescura.
Agrega un poco de agua
Si la comida de tu gato está muy seca, puedes agregar un poco de agua para que sea más fácil de comer. Asegúrate de que la comida no esté demasiado húmeda, ya que algunos gatos no quieren comer comidas muy húmedas. También puedes probar diferentes tipos de líquidos, como leche, jugo o sopa.
Dale un poco de atención
A veces, los gatos no comen porque se sienten solos o aburridos. Trata de pasar un poco de tiempo con tu gato mientras come, y habla con él o juega con él mientras come. También puedes probar dejar la televisión o la radio encendida para que tu gato no se sienta solo.
Aunque los gatos son naturalmente hidratados por la ingesta de agua a través de la comida, a veces necesitan un poco de ayuda para mantenerse hidratados. Los gatos pueden estar deshidratados por varias razones, incluyendo el estrés, la enfermedad o el calor. Si tu gato no está bebiendo agua, puede ser necesario que le ayudes a hidratarse.
Signos de deshidratación en gatos
Los gatos pueden estar deshidratados si tienen los ojos hundidos o si su piel no vuelve a su posición original después de ser presionada. También puedes ver signos de deshidratación si el gato está lethárico o si su lengua está pegajosa. Si notas cualquiera de estos signos, llama al veterinario de inmediato.
Cómo hidratar a un gato
Si tu gato no está bebiendo, puedes usar una jeringa o una botella para administrarle líquidos. Intenta usar agua tibia, ya que a los gatos les gusta la temperatura tibia. También puedes probar con un poco de sabor, como el jugo de manzana o el caldo de pollo (sin especias). Si tu gato no está tomando líquidos suficientes, puede ser necesario que el veterinario le administre líquidos por vía intravenosa.
Comida húmeda para gatos
Una dieta húmeda es la mejor opción para mantener hidratado a tu gato. Los gatos necesitan comer una dieta rica en agua, y la comida húmeda es una buena fuente de agua. Trata de darle a tu gato al menos una lata de comida húmeda al día. También puedes mezclar la comida húmeda con la comida seca para ayudar a tu gato a mantenerse hidratado.
Si tu gato no está bebiendo agua, puede ser necesario que le ayudes a hidratarse. Los gatos pueden estar deshidratados por varias razones, incluyendo el estrés, la enfermedad o el calor. Si notas cualquiera de estos signos, llama al veterinario de inmediato.